Te miro sonriéndote
con la palma de mi mano abierta,
quiero reflejar seguridad
mientras te pido que saltes conmigo al amor,
a lo desconocido,
a la incertidumbre.
Me veo calmada
pero tiemblo de miedo por dentro,
y es verás, cariño mío,
no solo te miro con mi mano abierta
esperando que la tomes con la tuya,
que la aprietes fuerte transmitiendo tu calidez,
que le des un beso tímido;
sino con el corazón,
abierto también y temeroso.
Un corazón
que ha sufrido su tajada justa de golpes
pero que esta aquí frente a ti,
con toda la valentía de la que es capaz,
pidiéndote que saltes al amor,
a nosotros,
que hagamos de nuestros caminos,
por fin,
uno solo.
Fotografía: @eva.chable