Creo que ya me vas conociendo, a mi, que soy a veces un poco despistada y otras veces un poco torpe. Yo,. que voy por la vida caminando, a veces corriendo, y no siempre me fijo por donde voy. ¿Sabes que pasará?
Un día de estos me voy a tropezar y se me saldrá desde el pecho por la boca un “te quiero” y ya no habrá vuelta atrás.
Las palabras dichas no pueden volver por la boca y des-articularse. Lo habré dicho y tu lo habrás escuchado. Y me llena de terror tu reacción, tu respuesta. No quiero evaporar la magia de nuestros encuentros matizándolas con sentimientos, que si bien están ahí, mientras no se digan están a salvo. Mientras no los diga, mi corazón esta a salvo.